Fluir

Fluir

Ayer con una paciente (gracias por espejearme) hablamos sobre fluir.
Creo que muchas veces ponemos muchas expectativas en el fluir.
Como si fluir fuera igual a me tiene que valer, a ignorar, dar el avión, distraerse, que otros decidan.
Para mí es como cuando te metes al río flotando en una dona, llanta o flotador.
Fluir es vivir con plena conciencia lo qué hay, es subirte a la dona y ESTAR presente, de forma activa observar el paisaje, tus sensaciones (la temperatura del agua, el clima afuera, la corriente), tus emociones (qué te provoca esa experiencia), reconociendo la compañía si vas con alguien, etc.
Es poner tu atención en el presente.

La resistencia o no fluir, es querer que sea diferente, tener expectativas (que la temperatura sea diferente, que el sol esté menos fuerte, poderlo disfrutar más, que sea otro el que te acompañe, tener que verte bien en traje de baño, etc.)

Y fluir no quiere decir me dejo llevar porque si me dejo llevar ¿a dónde voy llegar?
En el fluir, en participar activamente también le doy un poco de dirección, si solo me suelto a flotar acabo chocando en la orilla del río o me atoro con unas piedras. Y ahí suelto la responsabilidad de mi vida.

¿Estoy fluyendo o dependiendo de algo o alguien para que me lleve a algún lugar?

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